Transformación digital en las firmas de auditoria

Es un proceso y como tal, presenta riesgos, pero también oportunidades. Puede parecer una amenaza, pero no hacer nada es un riesgo aún mayor.

Los profesionales de la auditoría necesitan evolucionar no sólo porque sus clientes están evolucionando, sino porque la profesión contable ha iniciado un camino sin retorno. Vemos claramente la evolución de los sistemas de apoyo al proceso de auditoría, pero también de los sistemas de gestión de la propia empresa, que están sujetos a una nueva norma de gestión de la calidad, en la que está implícita la seguridad de la información y la protección de datos.

La aplicación de un proceso de digitalización requiere la participación de toda la organización y es una cuestión de estrategia. Es muy importante no perderse en la adquisición de las mejores herramientas del mercado, tratando de implementar potentes sistemas de análisis de datos y de inteligencia artificial si no tenemos la suficiente madurez tecnológica. Puede crear una ansiedad y frustración, no sólo para la inversión, sino también para el equipo de usuarios que mantienen una relación importante con los objetivos profesionales en la empresa y en sus propias carreras.

Por ejemplo, en cuanto al mercado de la auditoría en Brasil, sabemos que existe una gran diferencia entre el potencial de inversión y, en consecuencia, las tecnologías utilizadas entre las 4 grandes y las pequeñas y medianas firmas de auditoría. Sin embargo, creo que todavía hay que avanzar mucho en algunos puntos básicos como la estandarización de las metodologías y la centralización de los roles de trabajo. Asegurarse de que todos los auditores trabajan de la misma manera, con el mismo lenguaje y colaborando entre sí es algo muy evidente. ¿Es ésta también una práctica en su empresa? ¿Cómo se puede controlar la calidad exigida por la nueva norma cuando cada auditor trabaja a su manera? 

Y que nuestras soluciones cuentan con una metodología actualizada, pero sea cual sea el sistema o las hojas de cálculo, se ha hecho necesario un control de las mismas según la norma de gestión de calidad.

Además de los sistemas de gestión de auditorías, la empresa debe gestionarse sin perder de vista cuestiones de ciberseguridad y la ley vigente de protección de datos. Hoy en día, hay sistemas que controlan los distintos aspectos de la operación de la empresa: el documento que estamos leyendo, el programa que lo ha abierto, el sistema en el que funciona, la red en la que estamos, la conexión a Internet que utilizamos, etc.

Pero seguramente tenemos usuarios creando contraseñas como 123456. ¿le resulta familiar? ¡Cámbiela rápido! Según un estudio de NordPass es una de las contraseñas más utilizadas en Brasil.

Para monitorear tantos recursos, es fundamental contar con un directorio de identidades que aplique controles de usuarios de su organización, controles de dispositivos ya sean Windows, MAC o Linux, controles de contraseñas, políticas, entrada y salida de empleados, entre otras funciones. 

Podemos aplicar un concepto, muy importante, llamado Confianza Cero. Esta estrategia de seguridad implica una verificación permanente del acceso a los sistemas en función de la demanda de un profesional, y no lo contrario, que significaría dar acceso a todo. Hablamos de riesgos de auditoría.

Cualquier aplicación requiere un tiempo de formación y adaptación. Este paso a paso que hace que la empresa adquiera una madurez tecnológica más avanzada depende de la interacción y el entendimiento de todos los implicados, incluidos sus socios tecnológicos como Sinfopac International.

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